Várices: ¿Cómo podemos prevenir y tratar esta enfermedad?

La Insuficiencia Venosa Crónica se manifiesta por la aparición de venas dilatadas, palpables y visibles las que pueden producir dolor, calambres, pesadez y edema (hinchazón) de las piernas.

Si estas venas se encuentran dilatadas y sensibles ya no están cumpliendo su función. Todas las venas tienen en su interior un sistema de válvulas que evitan el retorno de sangre hacia los pies, facilitando que la sangre llegue al pulmón donde es oxigenada.

Casi el 20 o 30 % de la población presenta la enfermedad varicosa, siendo más frecuente en la población femenina que masculina. Su origen es genético, existiendo familias varicosas siendo los embarazos o el uso de anticonceptivos, lo que lo desencadena.



¿Cómo tratar las várices?

El diagnóstico y tratamiento actual requiere de un Cirujano Vascular. Para ello, se solicita un examen clínico y un estudio por ultrasonido llamado ECO Doppler Venoso, el cual nos dará una información anatómica, la cual nos orientará respecto del tratamiento a realizar.

Los tratamientos van desde la utilización de medicamentos y la compresión elástica con medias especiales, para así disminuir molestias en las piernas. Cuando la enfermedad ya está establecida, la utilización de la Escleroterapia (sustancias químicas esclerosantes o microespuma en el interior de las venas patológicas) o la aplicación de técnicas modernas asociadas a Cirugía Vascular y Endovascular, permitirán la eliminación de las várices desde sus orígenes.



¿Cómo prevenir la aparición de várices?

En su prevención no existe un método efectivo que ayude a evitar la aparición de las várices, ya que cuando la genética está presente lo más probable es que la enfermedad se desarrolle. No obstante, una vida saludable como una actividad física frecuente y ejercicios que fortalezcan la musculatura, contribuirán al control y desarrollo de la enfermedad.

Diagnósticos asociados

La Insuficiencia Venosa puede avanzar a la cronicidad, pudiendo desarrollar lesiones pigmentadas en la cara interna de los tobillos, llamado lipodermatoesclerosis. Posteriormente se pueden desarrollar úlceras venosas, las cuales son heridas que pueden invalidar nuestra actividad laboral.

Como complicación aguda se puede presentar la Trombosis Venosa. Este cuadro se produce a raíz de la obstrucción de una vena, la cual puede generar un cuadro inflamatorio agudo con dolor y a veces edema o hinchazón de la extremidad. En este escenario, se debe consultar a un especialista Cirujano Vascular o acudir a un Servicio de Urgencia.